14 jul 2012

Tom Hardy nos presenta al Monstruo

El actor británico llega a la cúspide de la fama ahora como el brutal villano de Batman: El Caballero de la Noche asciende.

Miguel Cane



Cuando dio inicio a su carrera hace más de una década, Tom Hardy (Londres, 1977) en la miniserie Hermanos de Sangre y con un papel en La caída del Halcón Negro de Ridley Scott, todo mundo pensó que el apuesto y fornido actor iba a ser una estrella instantánea. Pero la fama le pasó factura demasiado pronto y estuvo a punto de perder su carrera, cosa que lo mantuvo relegado a roles pequeños y a la televisión hasta que gracias a Nicolas Winding Refn, que lo llamó a protagonizar Bronson en 2008, vio aparecer una segunda oportunidad para volver a la gran pantalla; ahora, después de participar en El Origen, repite con Christopher Nolan como Bane, el villano principal en Batman: El Caballero de la Noche asciende.

Participar en la que es probablemente la cinta más anticipada del año ha sido un “plus” en la carrera de Hardy, acostumbrado a hacer papeles de duro, se vino a encontrar conque éste es particularmente difícil toda vez que ha pasado por la óptica de Nolan.



¿Cómo podrías definir a Bane y el rol que juega en la trama?
Creo que Bane es monstruosamente genial así que estoy muy emocionado por interpretarlo. Es como un pozo sin fondo, un abismo. Pero también tiene sentimientos y algunas texturas inesperadas. No es un personaje unidimensional para nada. Puedes clasificarlo como un villano, pero es mucho más que eso: es un antagonista.

¿Su oscuridad es intimidante cuando te acercas al personaje?
Sí, pero me cuidé de no llegar en absoluto hasta ese lugar oscuro. Hay una gran cantidad de personajes retorcidos y malévolos de los que es fácil distanciarse, y no hacer tuya su maldad. Eso es algo que me hizo sentir cómodo, al aceptar el personaje, supongo. Yo ya tengo mis propios problemas (se ríe).



¿Cuál dirías que es la diferencia entre Bane y el Guasón, que es el antagonista de la cinta anterior en la saga?
Son completamente distintos en sus motivaciones. El Guasón sólo quería ver arder el mundo, y era un maestro del caos y la destrucción, un loco sin escrúpulos. Bane no es de esta forma. Es mucho más meticuloso y calculador. Y supone una gran amenaza física para Batman, porque es como un leviatán y no se va a detener ante nada para aplastar a Batman. No hay nada confuso ni ambiguo en torno a Bane. No hay bromas. Es un monstruo muy centrado y muy claro en sus propósitos.

En la cinta no vemos tu rostro. ¿Es dificil interpretar de esta manera? ¿Requiere un mayor esfuerzo?
Cada vez que te pones algo cubriendo tu cara, vas a adoptar una personalidad y un físico que nada tiene que ver con la interpretación. Te permite que sea más libre. Creo que a Nolan le preocupaba que no quisiera ponérmela porque yo temiera que eso pudiera dañar mi carrera o algo así. Pensó que yo podría estar preocupado porque los espectadores no pudieran ver mi bello rostro (estalla en carcajadas). ¡Cómo si me importara! ¡Carajo, es Christopher Nolan! ¡Por él llevaría una bolsa de papel en la cabeza! Ahora bien, hay un detalle: que Bane use una máscara que altera su apariencia y su voz, es un riesgo, porque podrian reírse de él o también puede ser algo nuevo y excitante. El público no debería preocuparse por eso. A medida que avanza la película, te acostumbras a ella. Y sobre el esfuerzo, bueno, realmente la máscara que tuve que usar es muy ajustada. Pero me acostumbré a ella, con el tiempo uno se acostumbra a casi cualquier cosa.



¿Y la transformación física? Debió ser muy demandante
¡Hermano, no te imaginas! Es el trabajo de preparación física más demandante por la que he pasado. Ni cuando hice Warrior tuve que entrenar tanto. Tenía que aumentar mi masa muscular así que comía bandejas de pollo y brócoli cada tres horas y bebidas de proteínas entre las tomas, y tuve que hacer pesas desde las siete de la mañana hasta el anochecer, seis días a la semana durante las diez semanas previas al comienzo del rodaje y mientras se alargó la producción.

Las secuencias de acción y la pelea con Batman resultan muy impresionantes.
Ninguno de los dos personajes es muy verbal. Se expresan entre ellos con los puños. En la pelea climatica entre los ambos la acción física debía ser un diálogo más que contundente, con un punto final que impactara a los espectadores. ¿A qué tememos más que al dolor? Y ese es el tema que Nolan aplica: el dolor. Bane padece un dolor crónico y Batman tiene un alma adolorida. Sus cuerpos están conectados con la mente. Planificar esa pelea requirió mucho entrenar. Debíamos conseguir que cada patada, cada puñetazo tuviera significado, cada golpe era algo que transmitiera dolor; Christian es un gran profesional y fue maravilloso hacer estas escenas con él. Eso nos llevó muchas horas e hizo que acabáramos exhaustos al terminar de rodar la escena. Especialmente a él le exigió más, pero mi misión como personaje era llevarlo al punto de quiebra y Nolan nos hizo un marcaje muy de cerca.

Tu carrera ha tomado un “nuevo aire”, y este filme es clave en ello. ¿Cómo te sientes ahora como actor, en este momento?
Soy tremendamente afortunado. Telo digo sinceramente. Estoy contento simplemente de estar vivo. Al principio de mi carrera probé algo la fama y acabé de bruces en rehabilitación con una adicción a las drogas. Diez años después estoy aquí y no pienso regresar. Tuve que empezar de cero. Aprender a ser humilde. Eso es algo muy importante en esto. Yo siempre me acerco con cuidado a mis personajes. Para sacarlos adelante hay que hacerlo. Elijo las características que me inspiran o me interesan, como ocurrió con el de Bronson. Bane es complejo e interesante. Encuentro las cosas que me divierten, que me hacen reír o que me dan miedo, y trato de reflejarlas para que la gente sienta lo mismo. Bane es el terror más profundo que he encontrado en papel.

Tu próximo trabajo es la resurrección de Mad Max. ¿Temes la comparación con Mel Gibson?
No, en absoluto. Es un actor brillante y a mi generación le dio un trabajo brillante, eso es. Yo tengo un trabajo que hacer. Yo no estoy aquí para participar en una competición por el talento. Se trata de interpretar el personaje que me dan. Y hacerlo del mejor modo posible.

Nedstat Basic - Web site estadísticas gratuito El contador para sitios web particulares